Las judías verdes son los frutos y las vainas inmaduras de una leguminosa, Phaseolus vulgaris. Como todas las judías, tienen su origen en América, desde donde llegaron a Europa. Hasta los primeros años del siglo XIX no se cocinaban en verde, hoy es una de las verduras más consumidas. Aquí también las llamamos fréjoles.
No todas las judías que se consumen en seco tienen vainas aptas y con calidad para ser utilizarlas como judías verdes.
Comercialmente se venden muchos tipos de simientes de judías para cosecharlas en verde. Nosotros, partiendo de unas pequeñas judías de color blanco que nos regaló un amigo hace más de 15 años, las resembramos cada año y es una de las verduras más seguras y con más calidad que obtenemos en la huerta.
Para conseguir la simiente dejamos madurar y secar algunas vainas, las desgranamos y entre ellas escogemos las más sanas.
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Siembra
A principios del mes de mayo, después de haber labrado y asurcado una zona soleada de la huerta, sembramos nuestras judías. El proceso es idéntico al que os hemos contado en la entrada de los judiones.
Después, a principios del mes de julio, sembramos otras judías que estaremos cosechando hasta el principio de las heladas.
Cuidados
Nuestras judías verdes son de mata alta y necesitan que las pongamos tutores. Los utilizamos de bardal y hemos de ayudar a que los distintos tallos de las plantas los alcancen, recordad que son levógiras y se enrollan en el sentido contrario a las agujas del reloj.
Hemos de quitar las malas hierbas. En verano se riegan por inundación cada 5 ó 7 días.
Nosotros no hacemos ningún tratamiento fitosanitario. Si las primeras que sembramos son parasitadas por las arañas rojas las arrancamos y destruimos, ya tendremos las tardías produciendo.
Las judías
Las vainas de nuestras judías son de color verde oscuro, gruesas, planas, de 15 a 20 cm de longitud y con semillas poco marcadas en su interior. Las recolectamos a mano, de una en una y prácticamente a diario, hay que evitar la recogida de vainas demasiado maduras que por ser más fibrosas no tienen calidad.
Consumo
El 90% de su composición es agua pero son una fuente excelente de vitaminas C, A (en forma de betacarotenos) ácido fólico, minerales (potasio, fósforo yodo y magnesio) y de fibra soluble.
Las vainas demasiado maduras contienen fibra no digerible (lignina y celulosa) y debemos evitarlas, las distinguimos por tener los granos marcados e hilos. Para comprobar que son frescas, al juntar los extremos de una judía se partirá.
Las consumimos hervidas, en ensaladas, rehogadas, etc… También hacemos conservas con nuestras propias judías.
Nosotros para evitar la mortal toxina botulínica siempre comprobamos el buen estado de los tarros y las calentamos antes de su consumo.
Truco del abuelo
Cuando coge judías, las que están demasiado maduras («piponas» y con hebra) las corta pero no las consumimos. Dice que así favorece que en las plantas cuajen nuevas judías verdes y la calidad como secas de este tipo de judías es muy inferior al de las otras variedades que sembramos en la huerta.
RICARDO GIACOMAN dice
Se puede aplicar enraizante hecho a base de lenteja como el que muestras en uno de tus videos a una maceta donde se estan apenas germinando semillas de papaya.
o tengo que esperar a q la semilla germine y salga la plantita para echar enraizante ???
ESPERO TUS COMENTARIOS
GRACIAS
RICARDO
Huerta dice
Ricardo, creo que has confundido el canal de vídeo, ese no es nuestro. Saludos