La palabra orégano procede del latín origanum y ésta del griego oríganon; en griego oros es montaña y la raíz gan- significa brillar, destellar. Sería algo así como “brillo de la montaña”.
En esta zona hay matas de orégano silvestre en los claros del monte de robles, entre matorrales y en algunos prados que no se siegan.
Son plantas perennes y aquí muy poco frecuentes. Los habitantes que conocían el emplazamiento de estas matas guardaban el secreto celosamente, lo recolectaban todos los años para su autoconsumo y para regalar algunos manojos a familiares y amigos. Se utilizaba para los adobos de la habitual matanza, como condimento y como plantas medicinales.
Orégano autóctono
Algunos agricultores consiguieron adaptarlo en zonas concretas de las lindes de sus huertas y aún hoy algunos lo cosechan todos los años.
Mata de orégano trasplantada y prendida
Cultivo
Cosechar anualmente nuestro propio orégano autóctono en la huerta del Corneja es un legado que agradecemos al abuelo.
Hace cuatro años un amigo que lo cultiva le regaló un terrón (con un golpe de azada se extrae una porción de la parte aérea y de la raíz con la tierra).
Mata de orégano, sin limpiar en invierno y limpia
Necesita una zona soleada, húmeda pero no encharcada, con buena tierra. Esa mata inicial ya la hemos dividido un par de veces más y hoy lo tenemos en tres emplazamientos distintos buscando el lugar ideal donde prospere.
Los cuidados son mínimos, eliminar con la mano las malas hierbas que le hagan competencia, en invierno quitar las partes secas y las hojas de otros árboles que se hayan depositado en la mata y en primavera y verano, si es necesario, regarlo alguna vez para que no se seque.
Orégano recolectado
Nuestro orégano
Son plantas herbáceas perennes, subarbustivas, resistentes a las heladas invernales, con tallos de hasta un metro de altura, leñosos en su base, de sección cuadrangular, con pilosidades en dos caras y que se ramifican. Las hojas son elípticas, opuestas, de forma ovalada, enteras o ligeramente dentadas, frecuentemente pilosas y de color verde.
Detalle de flor de orégano
Las inflorescencias son terminales en espiga, tienen brácteas de color verde, un cáliz con cinco sépalos triangulares iguales y la corola de color blanco. Por todas estas características y según se describe en la Flora Ibérica (1) pensamos que se trata de Origanum vulgare subsp. virens (Hoffmanns & Link). La subespecie O. vulgare subsp. vulgare, es de porte más pequeño y tiene las brácteas y las flores de color púrpura.
Hojas, brácteas y flor de orégano
Las brácteas son órganos foliares distintos de las hojas, acompañan a los sépalos y sirven para proteger a las flores inmaduras. Son evidentes en el orégano, en el cantueso y también son brácteas la parte comestible de las alcachofas.
Orégano en verano
Cuando la mayoría de las flores están abiertas, suele ser entre mediados de agosto cortamos el orégano. Siempre dejamos algunos tallos para que caigan semillas.
Orégano seco
Conservación
Una vez cosechado, preparamos manojos atándolos con un cordel por los troncos, los metemos en bolsas de papel y sacamos el cordel por un agujero que hemos hecho en el fondo de la bolsa. Lo colgamos con el extremo abierto hacia abajo, en un sitio seco y sin luz natural para que se seque al aire.
Lo utilizamos seco frotando el manojo con la mano o cortamos las flores (flores, sépalos y brácteas) y con dos dedos las presionamos para separarlas de los tallos.
También se pueden aprovechar las hojas pero nosotros solamente consumimos la llamada «flor de orégano». A partir del año de su recolección pierde aroma y ya usamos el nuevo.
Usos
El orégano es una de las plantas aromáticas que más usos tradicionales tiene. En este enlace del Inventario Español del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, se describen muchos de ellos. Nosotros le damos los siguientes usos:
Conservante. Para preparar adobo (es una mezcla de pimentón, salmuera y orégano) utilizado para conservar en crudo y aromatizar parte de la matanza como el chorizo y la morcilla de calabaza y con el que elaboramos nuestro lomo adobado.
Condimento. Hoy lo utilizamos para condimentar algunas pizzas, pastas, aliño de aceitunas y a veces en las ensaladas de tomates.
Flor de orégano lista para consumir
Uso medicinal. Junto con la flor de malva y miel preparamos una infusión en leche para aliviar los síntomas de catarros y resfriados, por sus propiedades expectorantes, antiinflamatorias y antisépticas de las vías respiratorias.
Curiosidades
Es muy frecuente utilizar la frase proverbial “no todo el monte es orégano”, para indicar que en cualquier asunto no todas las cosas son fáciles o placenteras.
Tallos de orégano seco
Por toda la superficie de la planta del orégano hay glándulas con aceites esenciales con compuestos fenólicos (principalmente timol y carvacrol). Se obtienen industrialmente por destilación de las plantas. Tienen propiedades antioxidantes, fungicidas, bactericidas y bacteriostáticas. Existe mucha investigación en tecnología de los alimentos para utilizarlos como conservantes naturales sustituyendo a los aditivos de síntesis y en medicina humana y veterinaria para sustituir tratamientos con antibióticos, evitando las resistencias.
(1) Origanum L. R. Morales [21-VIII-2007] Flora Ibérica 8 Real Jardín Botánico, CSIC, Madrid