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Cómo proteger los cerezos de los pájaros

red

En la huerta tenemos injertados varios cerezos, la mayoría sobre patrones de cerezos silvestres de montaña y algunos sobre guindos.




Las cerezas maduran en julio, en esta época muchas aves ya han criado y son un alimento sabroso y muy fácil de obtener para adultos y crías. Hay algunas especies muy territoriales, como los mirlos, que se alimentan de uno en uno o en pequeños grupos familiares pero en el caso de los estorninos y tordos forman bandadas capaces de acabar en uno o dos días con las cerezas pintonas de cualquier árbol.

Flores de cerezos

Pequeñas cerezas

Cerezas pintonas

Cerezas casi maduras

Para luchar contra esta plaga hay multitud de métodos como colgar CDs, diseñar y colocar espantapájaros, utilizar aparatos que reproducen disparos o cantos de rapaces y otros muchos sistemas que se comercializan.
Os vamos a contar cómo lo hacemos nosotros.
Utilizamos redes ligeras de polietileno, también llamadas mallas antipájaros, con una luz de malla de 3 cm. Este sistema nos asegura que consumiremos nuestras cerezas bien maduras.

Pie de guindo con tres variedades de cerezas.

Vamos a proteger un pequeño cerezo, de unos 3 m. de altura, que está formándose aún, es el primer año que tiene una cosecha aceptable de cerezas y nos apetece probarlas maduras.

Guindo, escalera y vara.

También cubriremos un guindo de unos 4 m. de altura que tiene dos ramas injertadas de cerezos.

Red de plástico recogida después de utilizarla el año pasado.

Utilizaremos tres redes con la misma luz de malla, dos con un ancho de 4 m. y una longitud de 12 m. y una de 4X2 m.
Estos son los pasos:

  1. Haremos la poda pensando en que los árboles no deben alcanzar demasiada altura.
  2. Debajo y alrededor de los árboles despejamos y limpiamos la zona para que al manipular la red no se trabe.
  3. Detalle de la red puesta y el palo con hierba en su extremo.

  4. Para no dañar al cerezo preparamos 3 ó 4 varas de unos 2 metros, en un extremo las atamos un buen puñado de hierba verde y cada vara la fijamos con cuerdas en dos puntos de una rama. Han de sobresalir más que las ramas del cerezo y su función es facilitar la colocación de la red que quedará sobre ellas y no directamente sobre el cerezo.
  5. Desenrollamos y extendemos la red, atamos la punta de dos palos largos de avellano que tenemos preparados en dos puntos de un lateral de la parte mas larga de la malla. La separación entre estos dos puntos ha de ser un poco mayor a la del ancho del árbol a cubrir.
  6. Detalle red puesta.

  7. Entre dos personas cogemos los palos tensando la red en horizontal y la levantamos de forma vertical lo máximo posible, después avanzamos por los laterales del árbol y la colocamos extendida sobre el cerezo.
  8. El cerezo pequeño protegido

  9. Los extremos de la malla los atamos al tronco del árbol a un metro del suelo. Las aberturas laterales que quedan las hacemos un muñón inicial y cosemos con una cuerda o hilo grueso. Atamos todo perfectamente al tronco.
  10. En el caso del árbol grande utilizamos la red de 12×4 m y cosemos la de 4×2 m a uno de sus laterales. Después atamos todo al tronco.
  11. El guindo protegido con dos redes.

  12. Si la red quedara trabada en algún punto del árbol, no debemos tirar de ella ya que la romperíamos y el más mínimo agujero serviría de puerta de entrada para los pájaros. Utilizando un cepillo doméstico separamos la red del cerezo y tiramos para hacerla avanzar.
  13. Primera cosecha.

  14. Retirar las redes siempre es engorroso por el crecimiento de las ramas. En nuestro caso al tener los palos que sobresalen será sencillísimo. Descosemos y desatamos todo y con las varas de avellano la alzamos separándola del cerezo sin ningún problema.
  15. Es muy importante revisar minuciosamente la malla y reparar los posibles agujeros para futuros usos.

  16. Otro truco, para recogerla, la extenderemos, doblaremos varias veces a lo largo, la enrollaremos desde los extremos y la recogeremos en un ovillo que ataremos. Guardándola así nos ocupa menos espacio y nos facilitará su uso la próxima vez.

Estas son las cerezas más tempranas que cultivamos.

El método es sencillo, 100% efectivo, sin peligro para las aves y con un poco de paciencia y cuidado podemos cubrir árboles grandes si los tenemos bien podados.
Nosotros preferimos utilizar mallas de color negro porque su impacto visual es mucho menor que las blancas o las verdes.
Las cerezas las iremos cogiendo del cerezo según las vayamos consumiendo.




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