Lechugas en semillero
Todos los años hacemos nuestro semillero de lechugas directamente en al huerta.
Este sistema nos permite consumirlas desde el mes de junio hasta que comienzan las heladas, hacia el mes de octubre.
Semillero y lechugas
El abuelo no utiliza plásticos, ni invernaderos y siempre los hace al aire libre en un rincón de la huerta. Tiene dos grandes ventajas, al trasplantarlas prácticamente no sufrirán, por estar perfectamente adaptadas al terreno donde han germinado y nos permite ir reponiendo los huecos de las lechugas que cosechamos. Otras opciones pueden ser comprarlas con cepellón o hacer los semilleros en invernaderos pero hemos comprobado que su periodo de adaptación a nuestra huerta de montaña es más prolongado y no obtenemos los mismos éxitos.
Semillas de lechugas
El semillero
En el sitio elegido, normalmente en uno de los laterales de la huerta bien soleado, cavamos con la azada medio metro cuadrado hasta que la tierra quede bien suelta, esponjosa y disgregada. No utilizamos ningún tipo de abono.
Cavando el semillero
A partir de este momento sigue dos métodos:
- Si el tiempo está seco, traza con el dedo surcos poco profundos (de unos 5 cm) en hileras separadas unos 10 cm. y coloca con cuidado las pequeñas semillas de lechuga. Coge tierra al lado de semillero que esté bien suelta y la espolvorea con la mano hasta cubrir las semillas. Riega ligeramente y marca los laterales del semillero con unos tutores para evitar que lo pisemos.
Si el tiempo está muy soleado, crea con ramas un pequeño techo, de unos 50 cm. de altura, para dar sombra, minimizar la pérdida de humedad y facilitar así la germinación de las semillas. - Si el tiempo está húmedo, repartirá las semillas por toda la superficie y no le cubrirá con las ramas. El resto del proceso es el mismo, a veces no es necesario regar en este momento.
Semillas en la tierra
Lechugas con una semana.
Hace el semillero de lechugas el primer sábado del mes de abril y siembra la mitad, la otra mitad lo siembra dos semanas más tarde. Después seguirá sembrando más hileras hasta el mes de junio o hará otro pequeño semillero.
Lechugas nacidas. Sembradas en hileras en dos fechas distintas.
Cultivo
Cerca del semillero dejaremos dos surcos para ir trasplantando directamente las plantitas de lechugas, sin repicarlas. Estos surcos serán anchos, altos y estarán bien nivelados, en el centro los hacemos una canal no muy profunda, de extremo a extremo y a ambos lados colocaremos las lechugas, separándolas unos 15 cm. Este sistema nos permite regarlas por inundación, como al resto de la huerta y además las regaremos a demanda aportando agua con la regadera en este canalillo. En verano hay épocas que las regamos a diario.
Semillero
Truco del abuelo
Para regar las lechugas trasplantadas lo hará por inundación o echando el agua directamente sobre la tierra (en el canalito descrito, con una regadera), si regamos sobre las hojas se pudrirán más fácilmente.
Semillero
Las lechugas
Nosotros cultivamos lechugas de la variedad ‘maravilla de verano’ (tipo batavia) que son de tamaño medio, tienen buen sabor, hacen cogollo, son tiernas y se pueden cosechar en verano (no se espigan fácilmente).
Hemos de eliminar las malas hierbas y regarlas frecuentemente cuando hay altas temperaturas.
Ya hemos dicho otras veces que el agua de la zona es el alma de nuestra huerta. En el caso de las lechugas, que en su composición tienen más del 95% de agua, imaginaos la diferencia entre una lechuga que se riega con este agua, procedente directamente de los manantiales de la sierra y cultivada a la intemperie, con otra regada con otros tipos de agua, obtenida por cultivo intensivo y que lleve varios días conservada con frío. Son dos alimentos distintos.
Cultivando lechugas al lado del semillero.
Curiosidades
Segun la AECOSAN (Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición) las especies vegetales acumulan nitratos en sus partes verdes, estos nitratos son relativamente poco tóxicos, su toxicidad viene determinada por su potencialidad para convertirse en nitritos (pueden causar metahemoglobinemia) y en nitrosaminas y nitrosamidas (que son cancerígenas). Al comparar el riesgo/beneficio de la exposición de nitratos por el consumo de hortalizas prevalecen los efectos beneficiosos reconocidos por su consumo, en la población general. En la Unión Europea se han establecido límites máximos de nitratos en lechugas, espinacas y alimentos infantiles (Reglamento 1881/2006, de 19 de diciembre).
Lechugas con dos y cuatro hojas
Siguiendo las «Recomendaciones para el cultivo de hortalizas con bajo contenido en nitratos«, del Laboratorio Agrario de Zizurkil (Diputación Foral de Navarra) para obtener lechugas con el mínimo contenido de nitratos deberán cultivarse con luminosidad máxima y no se aportará ningún tipo de abono nitrogenado al agua de riego ni al suelo. Nuestras lechugas las cumplen todas.
Lechugas creciendo
Os hemos explicado un sencillo y practico método para obtener lechugas de forma escalonada durante una amplia temporada, como siempre se ha hecho, y os aseguramos que obtenemos sanas, tiernas y sabrosas lechugas en cantidad suficiente para el consumo de nuestra familia y para regalar alguna a los amigos.