Hoy os vamos a contar cómo cultivamos las patatas tempranas. Hay que tener en cuenta que nuestra huerta está en una zona de montaña del hemisferio norte, que las variedades más tempranas de patatas necesitan al menos 90 días para ser cosechadas, requieren una temperatura del suelo superior a 7ºC y que la parte aérea se hiela a 0ºC, por estas razones, nuestras patatas ‘tempranas’, en los años más favorables, las conseguimos cosechar a principios del mes de agosto.
Desde siempre en la zona, excelente productora de patatas tardías, se ha considerado que hay que cambiar la simiente y en vez de sembrar de la cosecha propia del año anterior las intercambiaban o compraban a otros agricultores. Como ya prácticamente nadie por aquí cultiva patatas para comercializar nosotros hace años que estas patatas las adquirimos certificadas para siembra de Burgos. Aseguramos así una uniformidad y unas garantías de sanidad vegetal que nos facilitan su cultivo y obtener buena cosecha.
Este año comparamos 5kg, son patatas de carne y piel amarilla.
Las sembramos enteras a principios del mes de mayo, si alguna es demasiado gorda la partimos en dos con la navaja, repartiendo las yemas por ambas mitades.
Las labores de preparación del terreno, siembra y riego son similares a las que os contamos en la entrada de las patatas finas de Gredos.
Estas patatas son frecuentemente atacadas por el escarabajo de la patata y sus larvas (Leptinotarsa decemlineata). Como la superficie sembrada es pequeña las observamos frecuentemente y destruimos los adultos, larvas y huevos que encontramos.
Es importante que los tubérculos estén secos en el momento de la recolección para evitar que se pudran, nosotros no las regamos al menos dos semanas antes de arrancarlas.
Este año hemos comenzado a arrancar las plantas más secas a principios del mes de agosto y el resto el día 20. Recogimos unos 70 kilos que ya estamos consumiendo, aunque aún teníamos en la bodega patatas tardías del año anterior.
Las patatas tienen forma ligeramente piriforme, piel fina y color amarillento. Nos están resultando excelentes tanto cocidas como fritas o asadas.
Suscríbete a mi canal:
Trucos del abuelo
Recoge las patatas pequeñas, las utilizamos para asar. Las muy pequeñas las pone en el compost. Si las dejamos en el terreno nacerán la mayoría el próximo año y serán un foco de infestación de escarabajos.
Los restos de las plantas (parras) los dejamos sobre el terreno y los incorporaremos con las primeras labores.
Para conservar las patatas las secamos al sol y las guardamos en banastas de madera, en ausencia de luz. En ningún caso las lavamos en este momento.
Si no podéis producir vuestras propias patatas, os aconsejamos que intentéis comprarlas directamente a los productores de la zona, aseguraos que no hayan utilizado herbicidas para secar las plantas antes de arrancarlas y que no las hayan sometido a ningún proceso de conservación. Notaréis la diferencia.
Deja una respuesta